La última emisión fue realmente espectacular. Con mucha
tensión, violencia y con una victoria del lado de nuestros protagonistas, como
casi nunca en la serie.
Si bien la balanza estaba inclinada claramente para Ramsay
Bolton, los Stark y sus aliados pudieron hacerse con la posesión de Invernalia. En un principio el ejército de Ramsay había cercado a los pocos sobrevivientes
del ejército de Snow pero la ayuda de la caballería de los Arryn fue fundamental para
desarmar y destruir por completo el ejército defensor. Cuando parecía que Bolton
iba a quedarse con la victoria, Sansa y “Meñique” aparecen con el ejército de
los Señores del Valle y dan la estocada final.
Una vez destruido su ejército, el ya demostrado miedoso Ramsay, cae en manos de Snow, que con una buena paliza de por medio, dejó a
Bolton atado y preparado para que Sansa pueda vengarse. Y como era debido, el
joven torturador muere destrozado por sus hambrientos perros, condenándolo al
olvido propio y de su casa. Una doble victoria que no solo implica recuperar el
Norte, sino que además venga la traición de los Bolton para con los Stark. Sin embargo una inquietante frase, todavía nos
da vuelta: “Estoy dentro de ti ahora”.
Por su parte, los Greyjoy cierran su alianza con Daenerys,
quién dispuesta a seguir conquistando, ya no teme mostrar el control absoluto
que tiene sobre sus dragones y todos los efectos adversos que podrían tener
aquellos que estén dispuestos a enfrentarla. Su ejército sigue creciendo y las adherencias
la ponen como firme candidata al trono.
Dispuestas así las cosas, el próximo episodio (que será más
extenso) cerrará la temporada. ¿Qué pasará con Ayra Stark? ¿Cuál será la suerte
de Cersei? ¿Cuál será la relación entre Jaime Lannister y los Frey? ¿Jon
partirá en busca de venganza, cuál es su verdadera misión? ¿Partirá Daenerys
para Poniente finalmente?
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